Celebrar nuestra Fiesta de 15 es tal vez uno de los acontecimientos más importantes en la vida de una mujer junto con el matrimonio y el nacimiento de los hijos, y lo que siempre deseamos es compartir estos bellos momentos con las personas que más queremos como nuestros padres.
Pero ¿qué pasa cuando no tenemos a alguno de nuestros progenitores a nuestro lado? Sea la razón que fuera por la que ya no están ahí, la verdad es que esto nos pone muchas veces melancólicas y nos entristece de sobremanera, pero hay que saber superar esta situación.
Sin embargo, debemos entender que lo que ellos siempre desearían es que, a pesar de su ausencia, quieren lo mejor para nosotras y que ese día sea verdaderamente de maravillas para que quede grabado para siempre en nuestros corazones.
Además, al cumplir quince años, y al llevar a cabo esta tradicional fiesta, se está simbolizando el paso de niña a mujer que una está dando, y por esa razón, lo más lógico es que empecemos a actuar como tales.
Una pena por la ausencia de un ser querido puede ser triste para cualquiera, sin embargo, si tanto queremos a ese ser ausente hagamos lo que a ellos más feliz los haría, y esto es, celebrando nuestra fiesta de quince años con el mejor espíritu posible y con la vitalidad de una niña que ya comenzó a ser mujer.
Es un gran paso que se da en la vida y la vida está llena de alegrías, pero también de algunas penas y sinsabores.
Pongamos nuestra mejor actitud y, aún cuando no tengamos a papá o a mamá a nuestro lado, pensemos en todo momento en ellos cuando estemos siendo homenajeadas por todos nuestros invitados.
Recuerda que siempre tendrás un tío o una tía, o quizás tus mismos padrinos que podrán reemplazar en ese momento con su presencia a alguno de tus padres. Total, esa también es la labor de un padrino.
Imagen: Evilbeetgossip
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